La fachada ventilada es el sistema más eficiente para el cerramiento de edificios que existe en la actualidad porque si una fachada no está correctamente aislada supone una pérdida energética considerable. Por eso la fachada ventilada encaja con una arquitectura sostenible ya que es caracterizada por crear una cámara de aire en la fachada exterior del edificio que favorece al ahorro energético.
Al combinar la fachada ventilada con un sistema de aislamiento exterior, dotamos al edificio de múltiples ventajas como el incremento del aislamiento térmico y acústico, entre otras ventajas.
Euro Rimor pone a su disposición un amplio equipo de instaladores altamente especializado y con experiencia acreditable para la ejecución de cualquier obra con independencia de su dificultad, volumen y ubicación.
De forma complementaria dispone de nuestro departamento técnico y comercial para atender todas las consultas que precise sobre el particular, presupuestos, plazos o sistema de ejecución.
¿Quieres saber más sobre la fachada ventilada? ¡Sigue leyendo!
INSTALACIÓN DE FACHADA VENTILADA
En qué consiste:
Entre el muro soporte y el revestimiento suele haber una capa de aislante, pero no siempre es así, ya que el propio muro soporte puede ser aislante o el material aislante puede colocarse por dentro de la vivienda.
Muro soporte
El muro soporte puede ser de ladrillo, hormigón o madera, entre otros materiales. Es el encargado de asegurar la estabilidad del edificio y por ende debe ser lo suficiente estable como para soportar el peso del revestimiento y los esfuerzos que este le transmite.
Cámara de aire
Consta de dos aperturas (parte superior e inferior), permitiendo así la circulación constante de aire. En la apertura superior, más conocida como arranque de la fachada, se incorpora un perfil perforado que permite la ventilación a través de sus orificios y constituye una protección anti roedores. En la apertura inferior o coronación de fachada se instala una chapa metálica de remate que protege contra la entrada de agua.
Material de revestimiento
Se pueden usar muchos materiales para el revestimiento exterior, como la cerámica, cerramientos metálicos, la madera o la pizarra natural. Lo más importante es optar por un material de calidad, resistente y duradero que complemente la eficiencia de la fachada ventilada.
¿Qué significa esto en términos de eficiencia energética?
Como consecuencia de las diferencias de temperatura, en este espacio intermedio se produce un fenómeno de convección natural conocido como «efecto chimenea».
Este fenómeno de convección natural hace que en verano el aire caliente suba y que la cámara de aire se renueve de aire más frío. Mientras que, en invierno, el aire no se calienta lo suficiente como para ascender, por lo que el aire de la cámara no se renueva y la capa de aislamiento retiene el calor que proviene del interior. Esto evita el sobrecalentamiento en los meses de más calor y hace que la temperatura interior de la vivienda se conserve mejor durante los meses más fríos.
Por lo tanto, la circulación constante del aire del exterior al interior de la cámara es esencial para que las prestaciones de la fachada ventilada sean óptimas. Ya que, como podemos observar, esta es la responsable de las numerosas ventajas que caracterizan a la fachada ventilada.